El Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Raúl Castro, envió una ofrenda floral al destacado científico, cuyo sepelio tuvo lugar este domingo en el cementerio Cristóbal Colón, de La Habana.

«Aún no podemos creer esta terrible noticia», aseguró al rotativo Granma, Ramiro Chirolded Cepero, amigo de la infancia de quien fuera, además, director del Instituto de Investigaciones Fundamentales en Agricultura Tropical (Inifat), en Santiago de las Vegas.

Nació en la localidad de Manacas, en la antigua provincia de Las Villas, el 17 de julio de 1945. Al triunfar la Revolución fue miembro de las Patrullas Juveniles, fundador de los CDR y Brigadista Conrado Benítez.

En 1969 se graduó de Ingeniero Agrónomo y en 1980 es promovido a Director General del Centro de Mejoramiento de Semillas Agámicas (CEMSA), que más tarde se transforma en Instituto de Investigaciones de Viandas Tropicales (INIVIT). En 1984 alcanzó el título de Doctor en Ciencias Biológicas en la Academia de Ciencias de Hungría, que al homologarse en Cuba recibe el nombre de Doctor en Ciencias Agrícolas; ostentaba las categorías científicas de investigador y profesor titular.

Desde niño «inspiraba respeto y admiración. Fue mi maestro de bioquímica durante la universidad, a pesar de ser solo tres años mayor que yo. Su muerte es inesperada y dolorosa», comentó Ramiro Chirolded durante la despedida de duelo en el Panteón de la Asociación de Detallistas de Víveres de La Habana, en el cementerio de Colón.

Despedida de duelo al Dr. en Ciencias Adolfo Rodríguez Nodals. Foto: Juvenal Balán

Para la Doctora en Ciencias Agrícolas Miriam Carrión Ramírez, compañera de bachillerato de Adolfo Rodríguez, «él fue quien nos enseñó a amar la agricultura e hizo que muchos de los que compartíamos aula con él nos decidiéramos a estudiar Agronomía».

Su sencillez, carisma, inteligencia y pasión por el cultivo de la tierra hacían que todos le siguiéramos, comentó.

Esas cualidades le hicieron merecer condecoraciones, medallas y premios, entre ellas la condición de Héroe Nacional del Trabajo, las Órdenes Carlos J. Finlay y Lázaro Peña, la medalla Servicio Distinguido de las Fuerzas Armadas Revolucionarias y el título de Doctor Honoris Causa en Ciencias Agrícolas, conferido por la Universidad Central Marta Abreu de Las Villas, convirtiéndose en el primer cubano distinguido en el país con esa categoría.

Adolfito, como le conocía la mayoría, asumió por indicaciones del Comandante en Jefe Fidel Castro, la Dirección del Instituto de Investigaciones Fundamentales en la Agricultura Tropical (Inifat) en 1991, labor que continuaba desempeñando hasta su fallecimiento.

Agradecemos al Doctor Adolfo Ramírez sus estudios y enseñanzas sobre el desarrollo de la producción de alimentos en cada territorio, según sus características agroclimáticas, expresó Nelson Companioni Concepción, secretario del Programa Nacional de Agricultura Urbana, Suburbana y Familiar.

«Hoy perdimos a Adolfito, pero continuaremos el enorme legado que nos deja», valoró.

(Con información de ACN y Radio Rebelde)