Conozco mujeres de fuego, que merecen las estrellas para arder y quemar alrededor. También conozco mujeres muy machistas con hijas tan valientes que deciden ser Adelas lorquianas. Las hay magas, que conjuran todos los días sobre cocinas eléctricas y cortan vestidos de cortinas o tienen jornadas laborales de 24 horas. (Leer más)