La Semana Mundial del Agua reúne cada año en Estocolmo a más de 500 organizaciones convocantes y 4.000 participantes procedentes de más de 130 países. La jornada está organizada por medio del Stockholm International Water Institute (SIWI) y se celebra de forma anual desde el año 1991.

Esta importante conferencia de nivel mundial sobre el agua se ha visto cancelada debido a la propagación mundial del COVID-19 y a las medidas tomadas por las autoridades nacionales y locales de cara a la contención de la enfermedad. La Semana Mundial del Agua se iba a celebrar del 23 al 28 de agosto de 2020 en Estocolmo.

Según datos del Banco Mundial, en 2050 cerca de mil millones de personas padecerían la falta de suministro de agua. Las causas, además del acelerado crecimiento demográfico, son la explotación indiscriminada de recursos naturales y la consiguiente contaminación.

La importancia del agua en todos los seres vivos es crucial. Es un elemento de la naturaleza que integra los ecosistemas naturales y es fundamental para el sostenimiento y la supervivencia de la vida en todo el planeta. Sin el agua no sería posible que se llevasen a cabo los procesos biológicos necesarios para la reproducción de la vida.

El agua es el componente más abundante en los medios orgánicos y, de promedio, todos los seres vivos tienen un 70%. No se trata tan solo de la necesidad de beber, de hidratarse, sino que el agua es reguladora de los ecosistemas terrestres, manteniendo un equilibrio necesario para la subsistencia animal y vegetal. Sin en el agua, la estabilidad del funcionamiento entre seres vivos y su entorno se debilitaría.

América Latina es la región del planeta con más reservas de agua, pero 37 millones de sus habitantes no la toman potable. La producción agrícola y minera funcionan como si el agua alcanzara y como si nunca se fuera a acabar.  Menos de la quinta parte de las aguas residuales de América Latina recibe tratamiento. El Mundo muestra en gran medida el olvido de que sin agua no hay vida, y esto es nada;  olvidan que el agua también representa memoria.

Somos consecuentes de la importancia que tiene el agua para la vida, su valor fundamental en la existencia hace que sea motivo temático en disímiles manifestaciones, tal es el caso de la poesía.  Los seres humanos hemos encontrado pasión en cientos de cosas que por sus efectos en nuestras historias personales vamos inmortalizándolas en la memoria y el arte.

El agua ha sido agasajada desde tiempos inmemoriales, rituales indígenas, cánticos celtas, composiciones musicales, artes visuales, alabanzas en todos los idiomas.

Para la poetisa chilena, Gabriela Mistral, el agua está presente en todos los mejores lugares de sus recuerdos. Para ella estos recuerdos donde el agua la transporta a su niñez y con añoranza desea en su interior regresar a ese pasado. Un anhelo donde el agua inunda sus memorias y estos versos.

Sirvan estos versos para despertar la conciencia de que ahorrar agua es tarea de todos.

Agua (Gabriela Mistral)

Hay países que yo recuerdo
como recuerdo mis infancias.
Son países de mar o río,
de pastales, de vegas y aguas.
Aldea mía sobre el Ródano,
rendida en río y en cigarras;
Antilla en palmas verdi-negras
que a medio mar está y me llama;
¡roca lígure de Portofino,
mar italiana, mar italiana!

Me han traído a país sin río,
tierras-Agar, tierras sin agua;
Saras blancas y Saras rojas,
donde pecaron otras razas,
de pecado rojo de atridas
que cuentan gredas tajeadas;
que no nacieron como un niño
con unas carnazones grasas,
cuando las oigo, sin un silbo,
cuando las cruzo, sin mirada.

Quiero volver a tierras niñas;
llévenme a un blando país de aguas.
En grandes pastos envejezca
y haga al río fábula y fábula.
Tenga una fuente por mi madre
y en la siesta salga a buscarla,
y en jarras baje de una peña
un agua dulce, aguda y áspera.

Me venza y pare los alientos
el agua acérrima y helada.
¡Rompa mi vaso y al beberla
me vuelva niñas las entrañas!