Si hablamos de los sucesos de aquel 26 de julio de 1953 rápidamente surgen palabras como rebeldía, victoria política, jóvenes y Fidel. Ese muchacho que había nucleado a la vanguardia revolucionaria cubana y la dirigía con entusiasmo y valentía.

El asalto a los Cuarteles “Moncada” y “Carlos Manuel de Céspedes” constituyó un fracaso militar, pero significó la chispa para encender la conciencia del pueblo; o como dijera Raúl recordando las palabras de Fidel: «el motor pequeño que echó a andar el grande­ del pueblo».

Luego, en 1975 y con motivo del Primer Congreso del Partido Comunista de Cuba, el propio Comandante en Jefe, aseguró:

«Sin el Moncada no habrían existido el Granma, la lucha de la Sierra Maestra y la victoria extraordinaria del Primero de Enero de 1959».

En esta importante acción participaron 153 jóvenes de la conocida Generación del Centenario, que tras la derrota fueron torturados y asesinados, o enjuiciados y condenados a prisión.

Los villaclareños

Entre estos valerosos jóvenes había seis villaclareños: los hermanos Haydée y Abel Santamaría Cuadrado, Pablo Agüero, Elpidio Sosa, Roberto Mederos y Osvaldo Socarrás.

Joaquina abraza a su hija Haydée Santamaría a la salida de la cárcel de mujeres de Guanajay, en donde la Heroína del Moncada cumplió seis meses de prisión por su participación en las acciones del 26 de julio de 1953.

-Haydée Santamaría (Encrucijada, 30 de diciembre de 1923-La Habana, 28 de julio de 1980):

fue la única de los villaclareños que sobrevivió al asalto y guardó prisión junto a Melba Hernández. Tras su liberación integró la Dirección Nacional del Movimiento 26 de Julio. Apoyó al destacamento guerrillero que dirigía Fidel Castro en la Sierra Maestra, y este le encomendó que obtuviera fondos y armas y aglutinara a los revolucionarios en el exterior. Regresó a Cuba al triunfar la Revolución, y trabajó en el Ministerio de Educación. Luego fundó y dirigió por muchos años la Casa de las Américas, desde donde influyó decisivamente en el devenir cultural del país.

Abel Santamaría

-Abel Santamaría Cuadrado (Encrucijada, 20 de octubre de 1927-Santiago de Cuba, 26 de julio de 1953):

segundo jefe del movimiento revolucionario que inició la lucha el 26 de julio, dirigido por el joven abogado Fidel Castro. Organizado, de seriedad probada y discreción extraordinaria que cayó asesinado en las acciones del Asalto al Cuartel Moncada en Santiago de Cuba. Llegó a ser, según lo expresa el propio Fidel en el juicio del Moncada «el alma del movimiento».

Pablo Agüero

-Pablo Agüero Guedes (Caibarién, 9 de agosto de 1935-Bayamo, julio de 1953):

con solo 17 años fue uno de los asaltantes al Cuartel “Carlos Manuel de Céspedes”, fracasada la acción, fue capturado a unos diez kilómetros de Bayamo por soldados batistianos y asesinado sin poder ofrecer resistencia.

Elpidio Sosa

-Elpidio Sosa (Quemado de Güines, 4 de marzo de 1929-Santiago de Cuba, 26 de julio de 1953):

nacido en Quemado, este joven de familia humilde pasó su infancia y juventud en Sagua, alternadas con frecuentes viajes a Isabela. Con solo 24 años, Elpidio Sosa cae prisionero y es asesinado en los muros del Cuartel Moncada, por los ideales que tanto defendió durante toda su vida. Cuentan que siempre le gustaba decir:

«Yo soy un hombre que quiere luchar; yo quiero participar en la historia».

Roberto Mederos

-Roberto Mederos (Sagua la Grande, 21 de febrero de 1929-Santiago de Cuba, 26 de julio de 1953):

Amante de la justicia y enemigo de la corrupción que existía en Cuba durante los gobiernos auténticos, pasó a militar en la Acción Juvenil Ortodoxa (AJO), donde llegó a ser Secretario Provincial en La Habana y estableció vínculos de amistad con Fidel y con otros jóvenes revolucionarios. El 24-25 de julio de 1953 llegó a Santiago de Cuba y se dirigió inmediatamente a la Granjita Siboney, allí fue asignado para realizar el Asalto al Hospital Civil Saturnino Lora, que apoyaría la toma del cuartel Moncada. La acción fracasó y, junto al grupo participante, fue detenido en el propio hospital y conducido al cuartel Moncada, donde lo asesinaron el 26 de julio de 1953.

Osvaldo Socarrás

-Osvaldo Socarrás (Santa Clara, 27 de noviembre de 1919-Santiago de Cuba, 26 de julio de 1953):

en 1953 se publica una entrevista en primera plana en la que declara: «Ahora gano menos que antes del 10 de marzo y paso más hambre… Los cubanos pobres sólo hemos recibido del gobierno que empezó el 10 de marzo y de todos los anteriores, hambre y miseria cada vez mayores». Debido a sus criterios tuvo que pasar a la clandestinidad donde conoce a Fidel y parte hacia Oriente. Fracasada la acción de la toma del Hospital Civil Saturnino Lora, decidió permanecer en el hospital junto a sus compañeros. Fue reconocido, apresado y asesinado en el Cuartel Moncada.

Estos cinco hombres que perdieron la vida en la acción y Haydée, que tanto hizo en ese momento y una vez triunfada la Revolución, se convirtieron en hijos ilustres de esta tierra al centro de la Isla. Sus nombres dejaron de ser de sus familias para formar parte de la gloriosa historia de Cuba.