«El deporte es simplemente hermoso, saca lo mejor de ti, te forma en disciplina, en rectitud, en amor a lo tuyo y a lo que representas».

Carol estudia primer año de Psicología, por lo que aún le falta un poco de tiempo para psicoanalizar a todos a su alrededor, pero eso no quita que su rutina sea ya bastante agitada. Este mismo domingo, día sagrado de descanso para algunos, participaba en la XXV edición del Marabana.

¿Cómo fue la experiencia?

«Este es mi primer maratón, ya a un estilo competitivo. Estaba entre mis intenciones participar el año pasado pero debido a las restricciones del Covid se suspendió.

«Creo que en buen tiempo clasifiqué entre los 400 primeros. Las lomas eran lo más complicado; mientras corría, ellas y yo íbamos teniendo una conversación. En algunos momentos me tocó ceder, y en otros cedieron ellas.

«Conocí a personas increíbles de todas partes de Cuba y del extranjero. Escuchar sus historias de qué los llevó allí y, sobre todo, la energía de todos apoyándote».

¿Desde qué edad te vinculaste al deporte?

«En el deporte llevo desde que estaba en primer grado. Comencé con tenis, deporte donde competí en los Juegos Nacionales, y esto me llevó a la EIDE. Después, en octavo grado, me cambié para tiro y cursé en esta disciplina hasta duodécimo.

«Me encanta todo lo que tiene que ver con la vida atlética, sobre todo para divertirme. Por eso, después de graduarme, continúe ejercitándome por mi cuenta con entrenadores y gimnasios.

« ¡Y ahora corro! Siempre me gustó, y mi vinculación con el mundo del deporte, me dejó la base necesaria.

«Soy miembro de los Cuban Runners, simplemente me mantengo al tanto de las carreras que se realizan y dependiendo de las distancias me inscribo en aquellas donde quiera participar. En cada actividad varían los lugares y los estilos. En esta nos dieron un diploma, en otras puede ser un pulóver».

Me contaron que no recibes Educación Física…

«Le pedí permiso a la profesora, porque mi objetivo fue siempre convalidar Educación Física para dedicarme a un entrenamiento más intenso, pues lo que realizan allí son clases de bailoterapia —esto sin ofender, porque son espectaculares y muy dinámicas—, pero sin compararse al nivel al que estoy adaptada.

«Ese tiempo me viene de perlas dedicarlo a mi superación personal para poder participar en próximos maratones como el de San José, o el de Varadero, en marzo».

¿Por qué Psicología?

«Siempre me llamó la atención los factores que subyacen a la conducta externa, por qué las personas se comportan de determinada manera, por qué ante igual estímulo en iguales condiciones las respuestas son más diferentes. Soy partidaria de que la mente lo puede todo y me apasiona la idea de ser capaz de lograr la empatía y ayudar a una persona».

¿Crees poder combinar tu carrera y el deporte?

«La psicología es una ciencia novísima y dentro de ella el campo de la psicología deportiva se encuentra aún menos explorada. Con los deportistas puedes aplicar instrumentos de psicología clínica que emplearías en cualquier persona, pero necesitan otro rigor porque ese factor subjetivo es casi tan importante como el físico.

«Si te das cuenta —si has observado los Juegos Olímpicos— podrás percatarte de que tenemos talento y hay ganas de trabajar; sin embargo, para ser campeón hay que tener mente de campeón. Un atleta que tiene todas las facultades físicas, la técnica y el talento suficiente, ¿cómo no va a ganar? Ahí la respuesta está en la psicología, en que se lo crea y eso necesitamos trabajarlo».

Por Yaisa Beatriz Coronado Gutiérrez, estudiante de Periodismo

Tomado de Criollito