… porque hiciste de esta escuela tu casa, y porque has hecho de la casa tu escuela y tu patria… porque la muerte no es verdad cuando se ha abrazado con honestidad y valentía la vida; y, porque una vida de servicio y virtud son siempre una escalera segura a la eternidad.

 

Familiares, colegas y estudiantes se reunieron esta mañana en la Sede “Félix Varela” de la Universidad Central “Marta Abreu” de Las Villas (UCLV) para dar el último adiós a la diva de la pedagogía: Selva Dolores Pérez Silva.

En lo adelante, contar la historia de la UCLV será también contar la historia de la carismática, alegre y optimista Selva que se burló de los prejuicios sociales para seguir su vocación de enseñar.

Será hablar de esta mujer merecedora del Premio Nacional de Pedagogía y de la categoría docente especial Profesor Emérito de la UCLV. Una maestra de maestros continuadora del legado de Félix Varela y Morales.

Entre lágrimas, Vladimir Hernández Meneses, Secretario de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) de la UCLV, rememoró historias y anécdotas de su relación con la también Doctora en Pedagogía y Ciencias Pedagógicas.

«Selvi cuanto dolor y que golpe tan fuerte, pero que ejemplo de estar ahí hasta el último aliento. Se le recordará por siempre, profe, y se le rendirá el mejor homenaje del mundo que es tenerla presente y seguir promoviendo el pensamiento de Varela y la labor pedagoga de esa mujer, negra y pobre, nacida en el Condado, que mantuvo los pies en el estribo hasta las primeras horas de la madrugada del 24 de junio de 2022», expresó.

Sus familiares depositaron una ofrenda floral en el busto de Félix Varela, ese cubano que marcó la labor como profesional de Selva. Ese que se convirtió en motivo de investigaciones y nombra la Cátedra Honorífica que fundó la querida pedagoga.

Personas como Selva no mueren, solo se van antes. Su legado las precede y su impacto en los otros es tal, que nunca se olvidan.

No he muerto, solo me fui antes

y no quiero que me recuerden con lágrimas,

como aquel que no tiene esperanzas.

No he muerto, aunque mi cuerpo no esté,

mi presencia se hará sentir.

Seré el silencio de nuestro hogar que tanto compartimos,

seré la brisa que besará sus rostros,

seré un recuerdo dulce que asista a su memoria,

seré una página bonita de su historia.

Perdón a todos, tomé únicamente uno de los trenes anteriores

y se me olvidó decirles…

No he muerto, solo me fui antes.

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