Con motivo del Día de las Madres, la Dirección de Comunicación Institucional conversó con Rosa Martha Alejo Leiva, secretaria del decano de la Facultad de Ciencias Sociales y miembro del Buró Universitario Sindical. Martha, como mejor se le conoce, representa un ejemplo de madre abnegada y trabajadora. Quienes han tenido el placer de compartir con ella expresan que su personalidad transmite sencillez y respeto hacia los demás. Ella es una mujer llena de vida
¿Qué representa la Universidad Central «Marta Abreu» de Las Villas (UCLV) para usted?
La UCLV representa demasiado. Puedo decir, sinceramente, que aquí ha transcurrido la mitad de mi vida. La Universidad es el lugar donde paso gran parte de mi tiempo, estoy laborando más aquí que en mi propia casa. Por eso me angustia cuando algo no funciona correctamente o cuando una tarea no se puede cumplir.
¿Qué impulsó a dedicarse a su profesión?
Comencé a trabajar en la universidad en el año 2002, pero como controladora de expediente en la anterior Facultad de Psicología. Realmente soy graduada de maestra primaria y cuando cumplí el servicio social en la provincia de Cienfuegos me incorporé luego a mi provincia. En aquel momento, en Santa Clara no había plazas vacantes de maestro primario que pudiera ejercer la carrera que había estudiado, por lo que me incorporé a otras labores.
Cuando comencé la UCLV, mi hija menor estaba cursando sus estudios en la Secundaria Básica. En la Facultad de Ciencias Sociales surge la necesidad de ocupar provisionalmente el puesto de secretaria y desde entonces estoy aquí, ejerciendo felizmente mis funciones de secretaria, en esta facultad a la que le debo tanto.
¿Hubo un momento o momentos clave que definieran su camino profesional?
El momento clave de definir mi camino profesional fue cuando ya mis hijas se podían hacer sus cosas y ayudar en las labores hogareñas. Fue en este preciso instante cuando me reincorporé a trabajar. Siempre he sido una mujer independiente y emprendedora, por eso decidí regresar al trabajo, para que mi familia tuviera un sustento más.
¿Cómo ha influido la maternidad en su forma de abordar su trabajo?
Aquí en mi trabajo me siento madre de los estudiantes. Siempre les brindo mi apoyo y les doy consejos como si fueran mis propios hijos.
¿Qué sueña dejar como legado, tanto en su campo profesional como en su familia?
Mi forma de actuar ante las complicaciones cotidianas, el amor tan grande que profeso por la UCLV; pero, sobre todo, mi incondicionalidad y mi sentido de pertenencia.
¿Algún mensaje o consejo a los jóvenes que se forman en esta casa de altos estudios?
Mi consejo a los nuevos profesionales es no amilanarse antes las vicisitudes que se encuentren en su ámbito laboral. Siempre dar lo mejor de sí en todas las tareas asignadas, y que cuando algo les salga mal sigan adelante. Considero que lo más importante es tener confianza en cada proceso de la vida, ya que todo esfuerzo lleva su sacrificio, pero luego trae frutos.
¿Cómo le gustaría que la recordaran en su ámbito profesional?
Como lo que soy: Martha, la secretaria. Esa secretaria que ama su profesión, que ayuda a los que necesitan de ella. Martha la dispuesta, la que nunca tiene un «no» en su boca cuando se trata del avance universitario.