Previo a la competencia real de este sábado, sesionó un taller para compartir experiencias de los concursos anteriores y analizar los resultados y la evolución de Cuba en los eventos regionales y en las Finales Mundiales de ACM-ICPC.
Según el Ing. Dovier Antonio Ripoll, Director General de la Sede Cubana, cada año el país muestra resultados ascendentes y está listo para un salto de calidad.
Asimismo, dijo que la aspiración para este 2017 es lograr la clasificación de tres equipos para la Final Mundial de 2018 en Beijing.
«Es un sueño posible, porque hemos dado pasos sólidos cada nueva competencia. Si lo logramos sería la primera vez que la Mayor de Las Antillas lleva a más de dos selecciones a esa instancia», concluyó.
La ACM-ICPC
Se trata de un torneo de programación anual entre universidades de todo el mundo. Su extensa denominación en siglas proviene de la Association for Computing Machinery (ACM), institución que lo organiza, y del nombre que tiene en inglés: International Collegiate Programming Contest (ICPC).
Surgió en 1970 en la Universidad A&M de Texas, Estados Unidos. Pero no tuvo alcance global hasta 1989, cuando se extendió desde Norteamérica a todo el planeta.
Cada año participan equipos provenientes de cientos de universidades de todas las zonas geográficas del mundo. La clasificación se realiza por regiones en las que se aplica la misma prueba a la vez. Las zonas son: Norteamérica, Europa, Asia, África, Pacífico Sur y América Latina. Estas se dividen en subregiones. Las de Latinoamérica son: México y Centroamérica, Sur América Norte, Sur América Brasil, Sur América Sur y Caribe, por la que compite Cuba.
