Cuando mañana se abran las puertas del Instituto de Biotecnología de las Plantas (IBP) de la Universidad Central “Marta Abreu” de Las Villas, su colectivo estará celebrando 27 años de la fundación de un centro líder de su tipo en Cuba y la América Latina.
Con el principio de desarrollar a ciclo completo sus aportes a la ciencia y la tecnología nacional, el IBP nació de la mano del Comandante en Jefe, con el objetivo de desarrollar investigaciones destinadas al mejoramiento genético de las plantas, y la sustitución de importaciones en semillas de alta calidad.
Desde su nacimiento, de la mano del Dr. Juan Nivaldo Pérez Ponce, hasta la actualidad, bajo la batuta del Dr. Osvaldo Fernández Martínez, varias generaciones de investigadores, técnicos y trabajadores han compartido múltiples experiencias y éxitos investigativos. Quizás la visita del Comandante en Jefe, Fidel Castro Ruz, aquel 30 de septiembre de 1996, permanece en la memoria de muchos.
La visita de Fidel al Instituto de Biotecnología de las Plantas fue especialmente comentada por él en la masiva movilización que horas más tarde tendría lugar en la Plaza de la Revolución “Ernesto Guevara” de esta ciudad. Allí el líder de la Revolución Cubana refirió:
“Hoy tuvimos la oportunidad de visitar —ya que mencioné la universidad— el [Instituto] de Biotecnología (APLAUSOS), que dirige el destacado compañero Pérez Ponce. ¡Qué grupo! ¡Qué colectivo! ¡Qué cosas están haciendo! Uno experimenta el deseo de que todo el mundo pudiera ver eso, y las diapositivas que nos mostró allí, cómo trabaja aplicando las técnicas más modernas en la mejora de las variedades y en la multiplicación. Qué trabajo hacen con el plátano, después que vino la sigatoka negra y acabó prácticamente con el plátano vianda y les hizo gran daño a las variedades de plátanos existentes en el país (…).”
“(…) Ya hay variedades nuevas que se han introducido y que se están mejorando, y cuando se introduce una variedad nueva hay que introducirla rápidamente. Es asombrosa la capacidad adquirida de multiplicar las variedades con técnicas absolutamente nuevas, de manera que en poco tiempo se pueden obtener todas las plantas a través de esa fábrica de vitroplantas (…)”
El IBP, como en sus albores, se concentra en desarrollar propuestas de alto valor agregado, competitivas, novedosas y diversas. Así ha mantenido el desarrollo y propagación de híbridos, caracterizados por su alto potencial productivo, acciones con especies forestales de difícil propagación, plantas ornamentales de alta calidad. También priorizan la embriogénesis somática en plátanos y bananos, como una opción eficiente de semillas de calidad superior, junto a otros cultivos de importancia agrícola.
A ello se suma la experiencia internacional en transferencia de tecnología al exterior y la robustez de sus programas de postgrado, que han recibido incluso reconocimientos de la Asociación Universitaria Iberoamericana de Postgrado (AUIP).
Este martes 19 de noviembre, su colectivo se propone agasajar a fundadores y trabajadores destacados del instituto en estos años de labor continua.
