Hoy cumpliría 94 años el hombre que más veces ha vencido a la muerte, el hombre que subió a la Sierra de lo imposible y bajó con la llama de la libertad. El barbudo, el gigante, el CABALLO. No hay mejor momento que el actual para volver a Fidel. Abrazarlo en sus discursos, escuchar sus acciones y materializar sus pensamientos. Sí, esos que dejó para nosotros. El principal: el de continuar con la indestructibilidad del proceso revolucionario cubano. Proceso único, continuo y ascendente.

Sobradas maneras de recordar hoy a Fidel. No hace falta una escuela, una calle o una institución con su nombre para venerar y continuar su legado. Nos toca, desde la posición que ocupamos, “luchar por nuestros sueños de justicia para Cuba y para el mundo”. Nos ocupa también, cuidar y cuidarnos en medio de esta pandemia. Pero, sobre todo, tatar de hacer una Cuba mejor.

Una Cuba por la cual luchó nuestro Comandante. Para que la salud, la educación, la libertad plena del hombre, fueran derechos inalienables. Ideas martianas, gestadas desde el programa del Moncada que vieron su materialización a partir del 1ro de enero de 1959. La visión inigualable del líder histórico de la Revolución cubana hizo que la utopía se convirtiera en certeza.

Fidel en la inauguración de la Biblioteca de la UCLV

La mirada futurista de Fidel dio al traste con la Universalización de la enseñanza. Una mediada convertida en el punto cardinal para hacer del futuro de este país, un futuro de hombres de ciencia. Luego de su primera visita a la Universidad Central “Marta Abreu” de Las Villas, en marzo de 1959 para inaugurar la biblioteca, volvería a la UCLV en varias oportunidades para promover o apoyar diferentes proyectos científicos.

Visita de Fidel al IBP de la UCLV

Dos de esas visitas son muy recordadas. La primera, cuando recorrió las áreas de lo que sería el Centro de Bioactivos Químicos (CBQ) y la otra, el momento en que compartió con científicos del Instituto de Biotecnología de las Plantas (IBP). Al decir del exrector de esta Casa de Altos estudios, Dr.C. Andres Castro Alegría, en esos encuentros “Fidel orientó, y más que eso, soñó cómo debía ser la universidad del futuro”.

Fidel recorre las áreas de lo que sería el CBQ

En ese camino se encuentra nuestra Alma Mater. Un camino que tiene como protagonistas a sus jóvenes estudiantes. Jóvenes de la misma estirpe de Mella, Camilo y el Che. Jóvenes fidelistas que no defraudan. Mantienen su paso firme frente a las nuevas y difíciles circunstancias.

“Nuestra juventud debe procurar adquirir aquellos conocimientos que sean útiles en cada momento a la nación. Sobre todo si se tiene en cuenta que estamos entrando en una etapa eternamente nueva”. Discurso pronunciado en el acto de la Universidad de La Habana, el 11 de mayo de 1959.

Así de presente y de revisión continua son las ideas de Fidel Castro Ruz. Pero más que ideas o conceptos, fueron hechos realizados. Por eso lo recordamos siempre, porque ponía en práctica sus pensamientos, por su perseverancia en hacer el bien sin buscar gloria. Y porque el honor, la inmortalidad y la vida eterna si caben en cinco letras, FIDEL.

Con información de Granma