El homenaje de la comunidad universitaria al Comandante de la Revolución Bolivariana Hugo Rafael Chávez Frías en ocasión del sexto aniversario de su desaparición física no podía hacerse sino como fue, a base de poesía y canción.

Foto: Malú Vilasa

 

Quizás porque su lucha fue un acto poético, porque su Revolución es un hecho poético; y quizás, porque como mejor lo recuerda su pueblo es cantando con furia llanera bajo la lluvia aquel 4 de octubre de 2012 cuando los venezolanos desbordaron siete avenidas en Caracas para cerrar la campaña presidencial.

Foto: Malú Vilasa

Entonces, este 5 marzo a las 4:25 de la tarde, justo cuando sonó el disparo de cañón desde el Cuartel de la Montaña en Venezuela; en el Teatro Universitario no podía más que escucharse en voz de Chávez el “Gloria al Bravo Pueblo”, Himno Nacional de la República Bolivariana de Venezuela cantado también por muchos profesores de la Universidad Central “Marta Abreu” de Las Villas como recuerdo latente de sus misiones en la tierra de Bolívar.

Tampoco faltaron el agradecimiento a quien hizo tanto por Cuba ni las imágenes elocuentes de un hombre pueblo en las que cobraron cuerpo aquellas palabras: ¡Chávez ya no soy yo!, ¡Chávez es un pueblo!. Chávez somos millones, tú también eres Chávez mujer venezolana, tú también eres Chávez joven venezolano, tú también eres Chávez niño venezolano, tú también eres Chávez soldado venezolano, tú también eres Chávez pescador, agricultor, campesino, comerciante, porque Chávez no soy yo, ¡Chávez es un pueblo!

Cuando Chávez hablaba de la muerte prefería entonar los versos del cantor Alí Primera: Los que mueren por la vida no pueden llamarse muertos y a partir de este momento es prohibido llorarlos; tal vez por eso a sus fieles a veces les habita la duda de su muerte y la certeza de su vida, y es entonces cuando han de acudir otra vez al poeta para desentrañar el misterio que es Chávez: su manera de estar vivo nunca va a tener medida.

Fotos: Prensa Presidencial de Venezuela