Entre tantas Lili que existen, la de esta entrevista es singular. Lleva la combinación de su carácter jaranero y su naturaleza de ser muy exigente con los demás y con ella misma. Cómo no conocer a esa mujer hiperactiva de 53 años que con inmenso placer y responsabilidad se sienta detrás de un buró, ubicado en una de las oficinas más solicitadas del edificio administrativo U-4, para ejercer su encargo como Especialista Principal del Grupo de Nómina y Estipendio de la Dirección de Contabilidad y Finanzas de la UCLV, su único centro de trabajo y del que asegura se va a retirar.
Acreedora de las distinciones Por la Educación Cubana, Rafael Maria de Mendive, la también Mariposa Lilia Esther Fernández López ya tiene 32 años de trabajo, en el que ha demostrado su capacidad y disposición ante cada tarea que se le asigna. La publicación de cuanto le contó a esta periodista estaba prevista para el día del Economista, por cierto, ella pidió insistentemente que felicitara a todos los que de una forma u otra se encuentran relacionados con esa rama. Pero no importa que haya sido hoy, porque todos los días son apropiados para reconocer el trabajo de quien lo merece y una mirada a la vida de Lili resulta un reconocimiento a la labor que realizan los economistas.
¿Cómo llegó a la UCLV?
Empecé a trabajar el 23 de enero de 1984, porque era estudiante del curso diurno, pero desaprobé el segundo año de la carrera de Contabilidad, que en aquel momento se llamaba Planificación de la Economía Cubana. Por unos compañeros que vivían en la cuadra mía comencé a trabajar en la Dirección. Me gradué por dirigido en julio de 1993 de Licenciatura en Contabilidad y Finanzas. Tengo ya 32 años de trabajo.
Empecé como operadora de micro en el grupo de Contabilidad. En el 2008 me gradué en una Maestría en Contabilidad Gerencial. Se lo agradezco a mi tutor Pablo García Portal, a quien le debo lo que soy. Ese mismo año recibí la Distinción del Ministro por el cumplimiento de todas las tareas y siempre también desde el 2004 soy la sustituta del Director Económico. De Lauchí que hoy es el Director de Contabilidad y Finanzas del MES, de Marilyn Martín, de Abel Sarduy. En el 2009 me fui para el Centro de Bioactivos Químicos cuando se independizó y comenzó a ser unidad presupuestada. Pero ya en junio del 2010 regresé para el Grupo de Nómina por una decisión de la Dirección Universitaria y aquí me he mantenido hasta ahora.
Su paso por el CBQ
En el CBQ me incorporé en marzo del 2009. Cuando me fui se fueron varias compañeras para allá conmigo. Capté el equipo. Ellas decían que se habían ido detrás de mí. Allí salí muy bien en todas las evaluaciones, auditorías y actividades. Allí estuve un año y un poquito, tiempo en el que además de hacer las cosas bien me llevé siempre excelente con todos mis compañeros, al igual que lo hago en esta dirección desde que estoy trabajando aquí.
Allí me bautizaron como Jefatina 1 pues fui la primera directora económica y todavía cuando me llaman de allá para cualquier duda o problema me localizan por la Jefatina 1.
Soy una persona que estoy muy comprometida con mi trabajo y con la universidad. Soy muy cumplidora, doy el paso al frente en lo que sea necesario, en cualquier auditoria doy respuesta rápido. No importa que no esté en mi profesiograma. Asumo cualquier responsabilidad.
Interrumpió su función en el 2015 para cumplir misión en Venezuela
El año pasado, el 11 de febrero de 2015 me fui para Venezuela como Vicecoordinadora de Aseguramiento de la misión Frente Francisco de Miranda, como una misión del MES, y allí recibimos una auditoría en el mes de noviembre con resultados satisfactorios.
Allá atendí algo similar a lo que atiendo aquí, pues me encargué de la parte de la nómina de todos los colaboradores, la parte operativa de los cheques de los pagos, entre otras cuestiones. Tenía bajo mi mando a tres choferes y un administrador, es decir, vivía con cuatro hombres en la misma habitación, muy respetuosos, por cierto. Imagínate ellos cocinaban. Esa era mi preocupación cuando me fui para allá. En el trabajo como tal me fue bien. Baje de peso porque soy una persona muy pegada a mi casa. Llamaba mucho. siempre estaba al tanto de mi casa.
Al regresar el 22 de diciembre me incorporé a la UCLV, venía de directora pero estaba Belkis Morales y recibí otras funciones pues fue cuando se fusionaron el Varela, el Fajardo y la sede central y se pensó en otra estructura con un grupo de Contabilidad y Finanzas en la Dirección General. Por conocer tan profundamente el trabajo en el grupo de Nómina que atiende algo tan importante como el pago a los trabajadores, me incorporé a la función que hoy ejerzo.
¿Cómo es Lili?
A pesar de que dicen que peleo mucho soy muy sincera, no soy hipócrita y me gusta exigir. Es cierto que peleo pero siempre con razón para que las cosas salgan lo mejor posible y en tiempo. Una característica que me distingue es que camino rápido.
Soy una persona muy humana, muy cumplidora. Tengo una muy buena memoria, me acuerdo de los cumpleaños de todo el mundo, incluyendo hijos, y me preocupo por llamar por teléfono siempre. Recuerdo a todos los que han pasado por aquí con fechas de llegada y de salida.
Me considero una mujer joven todavía, que tiene capacidad para cumplir cualquier tarea, soy sencilla, recta en algunas cosas, intransigente en los momentos que hace falta.
Desde el punto de vista laboral soy más bien técnico que dirigente porque me responsabilizo por todo y me considero una líder.
¿Por qué se considera una líder?
Porque arrastro a toda la dirección, a todo mi departamento. Si yo digo que el pago tiene que ser el domingo y vengo todo el mundo viene. Nadie es capaz de faltar. Creo que es porque soy ejemplo en todas las cosas. Siempre doy el paso al frente para cualquier actividad. Trato de ser la primera en acoger las iniciativas y crear las condiciones para hacerlas.
Cuénteme sobre su faceta de bailadora
Siempre fui muy bailadora desde pequeña. Estaba en ballet, en danza y hasta en deporte. Cuando estaba en la Escuela Osvaldo Herrera pertenecía al Conjunto 13 de marzo, estando en el pre. Cuando aquello nos dirigían los hermanos Vázquez. Bailábamos en carrozas, en los festivales de la FEEM y de la FEU. Me gustaba mucho la danza, pero me encantaban los números y entonces seguí estudiando hasta que obtuve la carrera. No obstante, nunca dejé de bailar, pues me desarrollo en todas las actividades que tengan música. Allá en Venezuela una de las cosas que más hice fue bailar y divertirme.
Su Familia…
Siempre he vivido con mi mamá que tiene 82 años. Mi papá murió en el 2000. Mi mamá sigue viva gracias a Dios. Mi hijo Oscar Luis, de 30 años, fue trabajador de la UCLV hasta noviembre del 2015. Hoy es el estadístico del equipo de pelota de Villa Clara. Vivo además con mi esposo desde hace 16 años. Me considero muy buena hija, pues mi mamá siempre me lo ha hecho todo, pero ahora me ha tocado a mí asumir. Somos una familia muy unida. Tengo un hermano y dos sobrinos, uno de ellos es como si fuera hijo mío. Su madre hace tiempo está cumpliendo misión y él y mi hijo son para mí lo más grande.
Mi familia siempre me ha apoyado. En la parte económica no hay horas para terminar, sobre todo esos días del pago de salario, de cierre. No tengo apuro para irme. Tengo todas las condiciones creadas pues mi madre y esposo me ayudan con todo en la casa.
La UCLV
He pasado los mejores años de mi vida en la universidad, desde bien joven hasta ahora. Aquí me formé, me desarrollé en todos los sentidos. Me han propuesto miles de lugares para trabajar y yo prefiero este a pesar de lo lejos que queda. Me gusta lo que hago. Si volviera a nacer fuera otra vez contadora y para mí en definitiva la universidad ha sido mi vida. Me parece que aquí me voy a jubilar.