Perteneciente al grupo fundador de la carrera de Ingeniería Eléctrica, el Dr. C. José Rafael Abreu García, profesor Emérito de la UCLV, forma parte de ese conjunto de personas que constituyen la historia viva de esta casa de altos estudios.  

Ingresó a la Universidad Central “Marta Abreu” de Las Villas el 30 de noviembre de 1959, cuando los tiempos, según sus propias palabras, eran muy convulsos. Las divisiones y la lucha de clases resultaban intensas, porque la burguesía y sus prejuicios comandaban a lo interno los procesos universitarios, pero la clase revolucionaria luchaba intensamente por cambiar dicha situación.  

«Durante el período nos dimos a la tarea de crear las Milicias Universitarias Ramón Pando Ferrer, cuyos miembros nos caracterizábamos por usas camisas blancas y por el fuerte entrenamiento que realizábamos. Cuando estas se convirtieron en milicias territoriales yo estuve entre los que fueron al Escambray para enfrentarse a la contrarrevolución interna durante cuatro meses».

Cuando se funda la Federación Estudiantil Universitaria en la UCLV, Abreu García se convierte en el primer presidente de la organización en su facultad. Durante su vida estudiantil también apoyó a quienes permanecieron al cuidado de los sospechosos de pertenecer a la Quinta Columna durante la invasión por Playa Girón; participó en la intervención de los colegios privados al proclamarse la nacionalización de la educación, fue profesor instructor no graduado durante la carestía profesoral de los inicios del período revolucionario y participó en el congreso constitutivo de la UJC.

De aquellos tiempos también rememora la creación de la Facultad Preparatoria como «una inyección desde el punto de vista revolucionario que cambió, prácticamente, toda la situación de la universidad».

Una vez graduado ocupó el cargo de Jefe de Departamento de Electrotecnia Básica, devino responsable de los cursos nocturnos de la Facultad de Tecnología y luego se desempeñó como director de la Escuela de Eléctrica, hasta el año 1970, cuando lo promovieron como cuadro no profesional del Partido Comunista de Cuba en la UCLV, donde se mantuvo durante diecinueve años. «Ello me ayudó mucho porque pude participar en el segundo y en el quinto congreso del PCC. He tenido suerte».

Desde 1976 ostenta la categoría docente principal Profesor Titular y desde 1980 es Doctor en Automática gracias a la ayuda de un asesor soviético, a quien asegura deberle la materialización de su doctorado. «Cuando él llegó a la UCLV, después de revisar todas mis investigaciones, me pidió, para la futura tesis, que cada noche escribiera una página, porque sabía que estaba complicado. Así, cada martes a las 9:00 a.m. le tenía que llevar siete páginas escritas. Yo, realmente, las escribía el domingo por la noche».

De los años del Período Especial comenta cuando el rector Luis Gómez convocó a que se trabajara en la estación experimental que estaba frente a la universidad para abastecer, aunque mínimamente, el comedor. «Cada semestre, por lo menos, empleábamos quince días en ese sitio guataqueando, sembrando y recolectando productos. Y a la par de esa labor agrícola teníamos que cumplir con nuestro plan de trabajo».

A casi 60 años de su ingreso a esta casa de altos estudios, el profesor José Rafael Abreu García no duda en afirmar que toda su vida está aquí. «Llegué sin conocer prácticamente nada de la vida, y la universidad me lo dio todo, desde los más elementales conocimientos hasta mi carrera profesional».

El agradecimiento a esa trayectoria se resume en el trabajo diario, en no haber faltado nunca a una actividad docente programada, en la formación de muchísimas generaciones de profesionales que hoy prestan sus servicios a la revolución.  

«Yo creo que es muy difícil que uno pida que lo recuerden, porque la vida continúa y su dinámica es muy complicada. Pero sí quisiera que cuando se mencione mi nombre se haga para ejemplificarme como un buen profesor, que siempre entendió a los jóvenes y los apoyó. Y que hizo todo lo posible por ennoblecer a su universidad».