Trabaja desde hace más de 20 años en el Comedor Central de nuestra Universidad.

Elizabeth Gómez Cortéz, es su nombre, pero todos los que la conocen y la quieren, le dicen solo Bety.

Bety es una de las madres de la UCLV que ha seguido trabajando durante toda esta etapa de aislamiento social, y a quien agradecemos en este segundo domingo de mayo, su valentía y su entrega.

Durante el enfrentamiento del país a esta pandemia del nuevo coronavirus, Bety se ha mantenido prestando servicio a los estudiantes extranjeros y profesores en la UCLV.

Con una jornada laboral que se inicia a las 4:30 a.m. y se extiende hasta las 7:00 p.m., Bety es parte de uno de los grupos que integran siete trabajadores, entre cocineros, personal de servicio y administrativos, los cuales se encargan en cada turno de labor de garantizar la alimentación a quienes deben mantenerse a aislados en las residencias estudiantiles o a quienes se hayan cumpliendo con su deber dentro de los predios de la institución.

El servicio de estos turnos de labor en el Comedor Central de la institución se ha organizado en tres días de servicio y tres de descanso.

En el mes de marzo, cuando se organizaron los grupos de trabajo que laborarían en esta etapa, se tuvo en cuenta la presencia de la mayor cantidad de personal residente en los repartos cercanos a la UCLV, para minimizar el movimiento de los que tienen que llegar hasta la UCLV cada día de labor. Cinco de los siete integrantes del turno de trabajo de Bety viven en lugares vecinos al centro. Ella vive en la ciudad, pero, aún así, viene a la Universidad cada día que le corresponde trabajar. No falta. Quienes le conocen saben que pueden contar con ella.

Bety: “Estamos cumpliendo con todas las normas de protección orientadas por las autoridades de salud, la distancia entre los trabajadores, el uso del nasobuco, el lavado frecuente de las manos”.

Desde la puesta en marcha de las medidas para el enfrentamiento a la COVID-19 en la UCLV y en Cuba, Bety y el resto de los trabajadores que conforman su turno de trabajo en el Comedor Central de la UCLV brindan servicio a 89 estudiantes extranjeros y 110 trabajadores.

En este segundo domingo de mayo, Día de las Madres, Bety es una de las madres que se hallará cumpliendo con su labor en medio de la batalla que libra toda una nación, para vencer un virus mortal.

Ella, es una madre para todos aquellos que la conocen, que la ven sonreír cada día y que agradecen su presencia y su alegría, aún en los tiempos más difíciles.

Sea este nuestro beso para todas las madres como Bety, las madres cubanas, en cualquier lugar donde se encuentren.

Bety: “A todos nuestros estudiantes mi mensaje es que se cuiden mucho, que se queden en casa. Les envío un abrazo fuerte. Los quiero mucho y los espero aquí”.

¡Feliz Día de las Madres e infinitas gracias!