Hace años dejamos de ver la sonrisa franca y el sombrero alón de ese hombre de pueblo, de quien el Che, amigo y hermano de lucha, dijera:
«Camilo era Camilo, señor de la Vanguardia, guerrillero completo que se imponía por esa guerra con colorido que sabía hacer».
Hoy, 62 años después de su desaparición física, Camilo Cienfuegos nos convoca con una flor en la mano. Y allá vamos, al encuentro de su alma revolucionaria, para compartirle nuestros logros y continuar su camino.
Para rendirle tributo, los trabajadores de la Universidad Central “Marta Abreu” de Las Villas (UCLV) se reunieron en el portal del Teatro Universitario. Allí, José Mario González, Secretario General del Buró Universitario Sindical en la UCLV, compartió anécdotas de la niñez y la vida del querido comandante.
Como ya es tradición en nuestro pueblo, los participantes marcharon hasta el río para depositar una ofrenda floral a ese compañero de mil batallas. A ese que Carlos Puebla le canta, y Fidel, pregunta: «¿Voy bien, Camilo?»
Desde acá, evocamos su figura con el poema “Mitologías”, de Nancy Morejón:
Habrá lluvias de octubre en su sombrero alón.
Pero, ¿dónde encontrar su barba fina,
acorralada entre esas aguas frías e imprevisibles?
¿Cómo apretar su firme mano
ebria de pensamiento y ebria de acto?
¿Dónde posar sus ojos,
aves anidadas del héroe?
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